La pandemia ha dado visibilidad a la importancia que tienen los perfiles profesionales relacionados con la tecnología, como analistas de datos y programadores. Pero desde hace un tiempo, el sector viene poniendo de manifiesto la brecha entre el sistema educativo y el mercado laboral. Y es que según un informe de ‘The Word Economic Forum’, el 65% de los estudiantes de Primaria trabajarán en empleos que aún no existen, principalmente relacionados con Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas.
Por ello, resulta necesario fomentar la formación en capacidades digitales. Los profesionales e instituciones defienden los beneficios que supone para los estudiantes la adquisición de estos conocimientos y habilidades, ya que favorecerían la igualdad de género y servirían para romper las barreras sociales.
atSistemas destaca la importancia de un acercamiento temprano del alumnado a la tecnología. Y es que es entre los cinco y los ocho años cuando realizan la asociación de roles o profesiones con género, por lo que es esencial la presencia de referentes, tanto masculinos como femeninos en el ámbito tecnológico, para inspirarlos y motivarlos a la hora de soñar sobre su futuro. Y también para que perciban que puede ser una respuesta a su pregunta: “¿Qué quiero ser de mayor?”.
Así, ¿qué aporta el aprendizaje de materias como la programación entre el alumnado?
Ayuda al desarrollo de otras capacidades.
Despierta la lógica.
Estimula la creatividad.
Trabajo en equipo.
Aprendizaje de una profesión de futuro.